¿Puede ser que con una vida no nos baste? A algunas personas no. Y eso, puede suponer un problema. No se puede vivir una vida que no es la tuya sin renunciar a la que tienes. Te enfrentas a consecuencias dolorosamente irreversibles.
El “problema” llega cuando te das cuenta que lo tienes todo, y aún así estás triste, desorientada, vacía. Algo no va bien, y no sabes qué. Puede ser que algunos no estemos programados para la felicidad. Te decepcionas a ti misma y te enfadas por sentirte así. Y decides, que tienes que ser feliz como sea. Y si tienes un montón de gente a tu lado que te quiere y que te apoya, entonces el problema está en ti. Y la solución también.
Así que me voy a dejar de gilipolleces de una vez e intentar ser feliz y sentirme bien por mí misma. ¿Cómo? Ahí está la clave, aún no lo sé, pero seguro que encuentro la manera. Y pronto. No hay tiempo que perder. Como dice mi Pizzigato favorito: “¡Ya está bien! ¡Basta ya de arañazos! ".
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